Bitacora - 2 [ESP]

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Había sido detectado justo al moverse por entre las ruinas. 

Rechingada suerte..., pensó. Parecía que iba a tenerla difícil en esta ocasión, la capacidad de disparo a distancia de las tropas de los panocos era bastante buena, había que reconocérselo, esos cabrones tienen mejor puntería que nosotros. En Corregidor se tenía más experiencia en combate cerrado, los Alguaciles eran la "policía" de Corregidor y toda la nave era un laberinto de módulos donde era muy difícil mantener un combate a distancia, era cierto que se entrenaba pero si no salían a misiones fuera de la nave, era bastante difícil lograr que perfeccionaran su disparo a distancia. Y para complicarlo esta misión estaba plagada de novatos, duros pero finalmente novatos. Los Alguaciles eran gente dura, a la hora de la verdad nadie se rajaba. Cuando se combatía se combatía con agallas y huevos, y eso era algo muy apreciado por todos los contratistas y un motivo de orgullo en la nación nómada.

De todo el escuadrón que había sido desplegado, solamente Sharik contaba con experiencia real, al rededor de unos doscientas horas de combate. Los bandidos eran gente extraña pero no tenía más cartas a la mano y a la hora de la verdad aquellos brujos siempre hacían lo suyo, a su manera pero lo hacían.

Cuando trató de tranquilizarse comenzó a escuchar disparos a lo lejos, carajo detectaron a Sharik también, había que comenzar a moverse. No podían quedarse así.

- Laura, ¿Me escuchas? - dijo a través de la red de radio interna.

- Si, fuerte y claro... - dijo dejando las palabras al aire- ¿Quién va?

Carajo, ¿Así o más novatos?

- Soy Juan, necesito que le des color al maldito nido de ametralladoras que está en el edificio en ruinas justo frente a ti,-dejó que la chica asimilara la orden y después prosiguió- necesitamos darle apoyo a Sharik. 

- Entendido, me pongo a con ello.

Espero unos segundos y asomó la cabeza para verificar que la ametralladora hubiese quedado marcada, a esa distancia era lo único que podía hacer por Sharik. Al asomarse alcanzó a divisar el láser rojo moverse a través de las ruinas y justo cuando parecía acercarse al punto de donde provenían los disparos, una fuerte ráfaga hizo eco en la zona. 

- ¡Mierda, le dieron a Laura! - gritó Romanov a través de la radio.

Me carga la chin...

- Solicito permiso para acercarme a Laura, parece ser que fue un tiro directo y está inconsciente, si actua...- no pudo terminar la frase cuando unas palabras extrañas sonaron a través de la línea de comunicación.

-Ninawaponesha, ¡Cabrones!

- ¡Espera Kyra! - la orden salió demasiado tarde, de nuevo el fuego de la ametralladora se hizo presente aunque esta vez hubo fuego de fusil de intercambio.

- Chingada madre, le dieron también a Kyra... -

- ¡Solicito permiso para apoyar! -La voz de Romanov sonaba bastante alterada, su respiración generaba un ruido molesto en la línea de comunicación. 

- No seas tonta Romanov, te van a dar a ti también y si eso pasa estamos más fritos que un par de huevos por la mañana -. La voz era de Kevin Martinez, otro Alguacil parte del equipo. 

- ¿Y entonces que hacemos Kevin? -contestó alterada Romanov- Se los va cargar la...- la frase fue interrumpida por el otro Alguacil del equipo, Pedro Hernández. 

- Por un demonio, ¡Cállense de una vez! Dejen que el Comando hable-.

El silencio, a pesar de solo durar unos cuantos segundos, fue bastante tenso. La respiración de Romanov se escuchaba a través de la línea y de forma muy tenue se escuchaban de fondo  las maldiciones de Martinez, solamente Pedro parecía estar en silencio. De Sharik no se escuchaba nada.

Tenía que hacer algo, estaba a cargo y tenía que lograr cumplir el objetivo de la misión. Respiró profundamente y comenzó a dibujar el plano de la batalla en su mente, el software de asistencia militar proporcionaba una ayuda enrome pero finalmente la estrategia tenía que salir de él, de sus propias decisiones y del análisis de la situación.

-Escuchen bien, -dijo con voz firme a través de la radio- Kevin te necesito en posición defensiva, vigila hacia tu flanco izquierdo, yo comenzaré a moverme por el lado derecho hacia donde se escucha el grueso de las tropas enemigas... -mientras hablaba una alarma en su casco comenzó a brillar, tropas enemigas aerotransportadas arribando a menos de 100 metros, la misión parecía complicarse más y más.

Esto se pone sabroso, pensó. No podía decirles que otro elemento enemigo estaba en camino, eso terminaría por bajar la moral de los novatos. Habría que arreglárselas como estaban. Venga Sharik, termina con el nido de una vez por todas...